Es poco común que alguien ofrezca un producto o servicio que no tenga sustitutos, o sea, que no haya ninguna otra forma de remplazarlo por algo similar. En mi caso, es decir, en nuestro ejemplo, hay miles de portales, libros y asesores que ofrecen muchos servicios que se pueden percibir como sustitutos de este libro.

Una ventaja competitiva es cualquier característica o atributo que nos diferencie de los demás y que nos permita estar en mejor posición para competir. Si bien hay infinidad de atributos que podemos considerar ventajas competitivas, vamos a mencionar algunos, tales como mano de obra muy calificada, conocimientos especiales o experiencia en temas de gran relevancia para una industria, acceso privilegiado a recursos naturales o a una ubicación geográfica especial o, también, una marca con un gran posicionamiento.

En nuestro ejemplo, consideramos tener un par de ventajas competitivas. La primera —y la principal— es la integralidad de la metodología que utilizamos, que combina definición con un propósito mayor, el diseño, validación y documentación del modelo de negocio (Canvas); la definición de la estrategia con las metodologías marco lógico, DOFA y Balanced Scorecard (BSC), así como una serie de poderosas tácticas gerenciales y financieras para organizar, motivar, liderar y controlar a tu equipo de trabajo.

Nuestra segunda ventaja competitiva son nuestras plataformas tecnológicas, que te permiten poner en práctica todas estas metodologías y tácticas en un sencillo proceso paso a paso, con la ayuda incondicional de RITA, nuestra gran asesora estratégica.

Ahora piensa cuáles son tus ventajas competitivas, saca un listado, reflexiona sobre cómo vas a aprovecharlas y documenta esas ideas tácticas para priorizarlas y ponerlas en práctica.