Ahora debemos ser creativos para definir con exactitud lo que tenemos que hacer para lograr cada uno de nuestros objetivos. Es claro que las estrategias (y, concretamente, los planes de acción) pueden cambiar con el paso del tiempo. Igual es muy importante que tanto nosotros como nuestro equipo sepan con claridad lo que vamos a hacer para alcanzar las metas fijadas.

Como primera medida, hay que dividir el plan de acción en tareas muy concretas y muchas veces secuenciales. Básicamente, vamos a hacer un plan que nos lleve por un proceso estructurado, paso a paso, para lograr cada objetivo. En nuestro ejemplo la meta 1 es el posicionamiento de nuestra marca, y el primer objetivo de esa meta es ser referentes en contenido relevante en redes sociales. Pensemos en un plan de acción para alcanzar dicho objetivo:

  • Definir el enfoque editorial de nuestros contenidos. En nuestro caso, buscamos contenido técnico de metodologías y ejemplos para ayudar a nuestros clientes a precisar su propósito, su modelo de vida o de negocio, su estrategia, y a realizar una ejecución eficaz y eficiente.
    • Dividir nuestros contenidos en temas de propósito, modelo de negocio, estrategia y ejecución o gerencia.
    • Definir lo que deseamos lograr con los contenidos de cada tema.
    • Precisar los canales y redes sociales adecuados para cada uno de nuestros segmentos de clientes.
    • Crear un cronograma mensual de publicaciones, organizado por tema.
    • Diseñar las plantillas de cada tipo de tema.
    • Establecer los responsables de producir los contenidos de cada tema y las fechas de entrega de estos.
    • Determinar las herramientas que se van a utilizar para producir, editar y publicar los contenidos y para interactuar con los clientes.
    • Hacer un presupuesto de este plan de acción.
    • Definir cómo vamos a medir los resultados de este plan de acción.
    • Asignar tareas a cada integrante del equipo.

Cada objetivo puede tener más de un plan de acción, si lo consideramos necesario; esto lo debemos hacer con cada uno de los objetivos. Obviamente, hay que monitorear constantemente su ejecución para tomar los correctivos del caso en cada paso.